COSTA RICA.- Las estaciones de servicio en las comunidades de la zona fronteriza entre Costa Rica y Panamá están experimentando una aguda escasez de combustible, provocada por las protestas que han tenido lugar en Panamá desde el 27 de octubre. La Cámara de Empresarios del Combustible de Costa Rica informó este viernes que las estaciones de servicio en esa región han duplicado e incluso triplicado sus compras de combustible a la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope), la empresa estatal encargada de la importación, refinación y distribución de combustibles en todo el país.
José Miguel Masís, director ejecutivo de la Cámara de Empresarios del Combustible de Costa Rica, indicó que la distancia entre la capital, San José, y la frontera con Panamá ha llevado a un aumento significativo en las compras de combustible, especialmente los fines de semana. Se ha observado una alta afluencia de consumidores en la zona, y los empresarios están trabajando arduamente para mantener un servicio constante.
En Paso Canoas, una comunidad en la línea fronteriza con Panamá, los residentes informan que las filas en las estaciones de servicio pueden extenderse hasta una hora y media. Algunas personas se ven obligadas a cargar recipientes de plástico con asa para transportar combustible, exacerbando la tensión en la región.
Wilbert Solano, director regional de la Fuerza Pública en la zona sur de Costa Rica, señaló que las protestas en Panamá han generado escasez en ese país, aumentando la demanda del lado costarricense. Además, como medida preventiva, algunas fincas agrícolas han comprado combustible adicional para garantizar que no falte en sus operaciones diarias.
Las protestas en Panamá se desencadenaron por la renovación de un contrato para la explotación de cobre, criticado por su potencial impacto negativo en el medio ambiente. La situación ha afectado significativamente la operación terrestre por Centroamérica en los últimos meses, complicando las rutas de transporte.
Francisco Quirós, vicepresidente de la Cámara Nacional de Transportistas de Carga de Costa Rica, destacó que las protestas en Guatemala, la suspensión de la solicitud mutua de visa con Honduras y las actuales protestas en Panamá han complicado la operación logística en la región. La retención de transportistas en Panamá ha llevado a la suspensión del tránsito desde Costa Rica, ya que las autoridades panameñas no pueden garantizar la seguridad de los vehículos y la mercancía.
Carlos Montenegro, director de la Cámara de Industrias de Costa Rica, expresó su preocupación por las pérdidas sufridas debido al vandalismo en Panamá. A pesar de que la aduana panameña está abierta, los camiones no pueden avanzar, y se están evaluando opciones de transporte alternativas, aunque ninguna parece ser viable en estos momentos. Según Montenegro, las pérdidas a fecha de 9 de noviembre podrían alcanzar los US$ 30 millones, con Costa Rica exportando alrededor de US$ 600 millones al año a Panamá.
Panamá representa el tercer mercado de exportación de Costa Rica en Centroamérica, con el 20% de las exportaciones de la región en 2022. Los sectores más afectados son alimentario (36%), químico-farmacéutico (28%), plástico (10%) y eléctrico y electrónico (6%), según la Promotora de Comercio Exterior de Costa Rica (Procomer). La incertidumbre persiste, ya que no se visualiza una solución inmediata a esta crisis que afecta a ambas naciones.