Roma. – El martes 22 de agosto, en honor a las víctimas de actos de violencia motivados por la religión o creencias, el Papa Francisco emitió un llamado enérgico a evitar el uso del nombre de Dios para respaldar el odio y los asesinatos.
A través de su cuenta en la plataforma X (anteriormente conocida como Twitter), el Santo Padre compartió el siguiente mensaje: “Renuevo el llamado a detener la instrumentalización de las religiones con el fin de fomentar el odio, la violencia, el extremismo o el fanatismo ciego, y a abandonar la práctica de utilizar el nombre de Dios para justificar actos de homicidio, exilio, terrorismo y opresión. #AgainstReligiousViolence”.
A pesar de la persistente existencia de actos de violencia y discriminación religiosa en todo el mundo, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 22 de agosto como el Día Internacional en Conmemoración de las Víctimas de Actos de Violencia Basados en la Religión o la Creencia. Esta designación tiene como objetivo condenar la violencia que se origina a partir de cuestiones religiosas, fomentar el diálogo interreligioso y proteger los derechos de las minorías religiosas.