El Vaticano ha aclarado que no está involucrado en la decisión de construir un altar valorado en 5 millones de euros, que será utilizado para una Misa en la Jornada Mundial de Juventud (JMJ) en Lisboa.
Según el Director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, la organización del evento es local y por lo tanto, la decisión del costo recae en el Ayuntamiento de Lisboa.
El costo elevado del altar ha generado críticas y ha sido motivo de polémica, pero el alcalde de la ciudad, Carlos Moedas, ha argumentado que las especificaciones del escenario fueron definidas en reuniones con la Jornada Mundial de la Juventud, la Iglesia y la Santa Sede.
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