Los obispos del altiplano peruano han expresado su preocupación por los actos de violencia ocurridos durante las protestas en el sur del país y han hecho un llamado a través de un comunicado público del 23 de Enero al Congreso de la República y al Poder Ejecutivo para buscar una solución inmediata a esta problemática.
En dicho pronunciamiento, los obispos peruanos hacen mención a la exhortación del Papa Francisco del 22 de Enero y señalan seis puntos importantes sobre los eventos recientes.
“No a la violencia, venga de donde venga! ¡No más muertes!”. Lo resalta el comunicado firmado por el obispo de la Diócesis de Puno, monseñor Jorge Carrión; el obispo de la diócesis de Sicuani y Administrador Apostólico de la Prelatura de Ayaviri, monseñor Pedro Bustamante; el obispo prelado de Huancané, monseñor Giovanni Cefai, y el obispo prelado de Juli, monseñor Ciro Quispe.