EE.UU. – Megan Rapinoe, quien se despidió del fútbol este sábado debido a una desafortunada lesión en los primeros minutos de la final de la NWSL, expresó su agradecimiento a todos los que la acompañaron a lo largo de su extraordinaria carrera.
«Definitivamente no es como me había imaginado este último partido… Estoy bastante segura de que me he roto el tendón de Aquiles», comentó con una sonrisa amarga a la retransmisión de la cadena CBS. A pesar de la adversidad, Rapinoe se mostró orgullosa de su equipo, el OL Reign, reconociendo el esfuerzo y dando mérito al Gotham por el título. Expresó su gratitud a todos los que compartieron el viaje a lo largo de su carrera, destacando la increíble experiencia que vivió.
Doble campeona del mundo con Estados Unidos, ganadora del Oro en Londres 2012 y galardonada con el Balón de Oro en 2019, Rapinoe, en el que sería su último partido profesional, se vio obligada a retirarse por lesión tan solo seis minutos después de comenzar la final entre el OL Reign y el NJ/NY Gotham.
La futbolista legendario se resbaló en el minuto 3 en una jugada sin contacto con jugadoras rivales y, entre lágrimas, tuvo que abandonar el campo cojeando, con la asistencia del personal médico del OL Reign y el aplauso de los aficionados en el Snapdragon Stadium de San Diego (EE.UU.).
Antes de dejar el campo, Rapinoe recibió el abrazo de Ali Krieger, una amiga cercana y también doble campeona del mundo con Estados Unidos, quien, al igual que Rapinoe, también se retiraba esa noche.
En las gradas, Sue Bird, pareja de Rapinoe y una figura histórica de la WNBA, mostró su preocupación por la lesión de la futbolista mientras se despedía de su destacada carrera de manera inesperada y emotiva.