RÍO DE JANEIRO.- Una tragedia sacude a Brasil después de que Heloisa dos Santos Silva, una niña de tres años, fuera víctima de disparos efectuados por elementos de la policía durante un control de tráfico. La lamentable noticia ha conmovido a todo el país y ha generado una ola de indignación. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva se unió a las voces que condenaron enérgicamente este trágico suceso.
Heloisa dos Santos Silva, de tan solo tres años, perdió la vida debido a un paro cardiorrespiratorio después de haber estado hospitalizada durante nueve angustiosos días. Las heridas de bala que sufrió en el incidente fueron fatales, según informó el departamento de salud de Duque de Caxias, ubicado cerca de Río de Janeiro, donde recibía tratamiento médico.
Los informes de testigos y familiares señalan que la menor y su familia regresaban a su hogar en automóvil el pasado 7 de septiembre, día de la independencia de Brasil, cuando fueron detenidos por agentes de la policía federal de carreteras. Los agentes, en lugar de proceder con un procedimiento de rutina, abrieron fuego contra el vehículo, hiriendo gravemente a la niña en el cuello y el hombro.
El padre de Heloisa declaró ante las autoridades que estaba deteniendo el automóvil cuando la policía abrió fuego, contradiciendo así la versión de los agentes, quienes afirmaron que perseguían el vehículo porque estaba registrado como robado.
El presidente Lula, en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, expresó su consternación y condena por este acto de violencia policial. «La muerte de Heloisa dos Santos Silva es una tragedia que no debería haber ocurrido. Una niña de tres años murió por disparos efectuados por quienes se supone que protegen al pueblo. Esto simplemente no puede ocurrir», declaró el mandatario.
Este trágico incidente se suma a una serie de casos lamentables en el área metropolitana de Río de Janeiro, donde ocho niñas han perdido la vida a tiros este año, según el grupo de vigilancia Fogo Cruzado. Tres de estas muertes se han producido en operaciones policiales, lo que ha generado un debate urgente sobre la necesidad de reformar las prácticas policiales y garantizar la seguridad de los ciudadanos, especialmente de los más vulnerables.
Las investigaciones sobre la muerte de Heloisa dos Santos Silva continúan, y se ha solicitado la detención de los tres agentes involucrados en este trágico episodio, mientras Brasil llora la pérdida de una niña inocente que se ha convertido en un símbolo de la lucha por la justicia y el respeto a los derechos humanos en el país.