Hawaii. – Tras casi dos semanas de cumplir 15 años, un niño perdió la vida en medio de una tragedia devastadora. Durante un incendio forestal que asoló la ciudad de Lahaina, en Hawái, el 9 de agosto, Keyiro Fuentes y su perrito fallecieron calcinados, dejando un dolor inconmensurable en su familia.
La familia, originaria de México, compartió su desgarradora experiencia al enterarse del incendio. A pesar de sus intentos desesperados, no pudieron llegar a la casa donde Keyiro y su fiel mascota dormían. «Me dijeron que no quedaba nadie. Que lo buscara lejos del fuego», expresó la madre del niño, quien en medio de su angustia fue detenida en su intento por acercarse al lugar.
Durante varios días, la familia buscó incansablemente a Keyiro en refugios y entre amigos, reportándolo como desaparecido. Sin embargo, las esperanzas se desvanecieron gradualmente a medida que pasaba el tiempo y no había noticias de su paradero.
Finalmente, un grupo de amigos de la familia que visitaron la zona del incendio descubrieron el cuerpo del adolescente. A pesar de la expectativa de encontrar solo cenizas, la madre se encontró con la desgarradora imagen de su hijo y su querido perrito, carbonizados en su dormitorio. El dolor fue inmenso, y entre lágrimas y sollozos, solo pudo expresar su profundo deseo: «por favor, Dios, cuídalo por mí. Espera ahí, hijo mío, porque un día también me iré de esta Tierra».
El esposo de Luz envolvió el cuerpo en una lona que encontró entre los restos de la casa y lo llevó en el auto hasta una estación de policía para completar los trámites necesarios. A pesar del inmenso dolor, la madre recuerda con cariño los momentos felices que compartió con su hijo, como el día en que hablaron sobre su próximo cumpleaños, recordando las risas y la alegría que él irradiaba.
En un emotivo encuentro en un parque, la comunidad reunió fuerzas para dar su último adiós a Keyiro. Un letrero con las palabras «Feliz cumpleaños Keyiro hasta el cielo» se alzaba en honor a su joven vida que se apagó trágicamente. El recuerdo del niño y su valiente perrito permanecerá en los corazones de aquellos que los amaron y extrañaron, uniendo a la comunidad en un gesto de amor y solidaridad en medio del dolor.