Japón. – Un grupo de aproximadamente cien pescadores y residentes de la prefectura de Fukushima, en el noreste de Japón, tiene previsto presentar una denuncia contra el gobierno japonés esta semana con el objetivo de detener el vertido de agua contaminada de la central nuclear accidentada en el océano.
Según Sugie Tanji, miembro del colectivo que lidera esta acción, la denuncia se llevará a cabo el próximo viernes en el tribunal de primera instancia de Fukushima. Tanji expresó su preocupación por el hecho de que el gobierno no haya cumplido su promesa de obtener el acuerdo de los pescadores antes de tomar la decisión de verter el agua al mar, lo que, en su opinión, aumenta el sufrimiento de las víctimas del accidente nuclear.
Desde el trágico suceso de 2011, cuando un tsunami causó graves daños en la central nuclear de Fukushima, uno de los peores desastres nucleares del mundo, numerosos pescadores han expresado temores sobre las posibles consecuencias del vertido del agua, que se utilizó para enfriar los reactores dañados.
A finales de agosto, Japón comenzó a verter esta agua en el océano Pacífico, lo que resultó en la suspensión de todas las importaciones de productos del mar japoneses por parte de China y Hong Kong. Estos dos mercados representaban el 42 por ciento de las exportaciones del sector pesquero japonés en 2022.
El gobierno japonés ha instado a China a levantar estas restricciones comerciales, argumentando que el vertido fue aprobado por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). Japón insiste en que ha tomado medidas para descontaminar el agua de la mayoría de las sustancias radioactivas, garantizando así un proceso seguro para el medio ambiente y la salud de la población.