VERACRUZ.- En medio de una inusual y severa sequía que afecta al norte de Veracruz, dos presas de reserva construidas hace apenas dos años se encuentran al borde de secarse por completo. Estas reservas de agua fueron creadas con la intención de afrontar situaciones de emergencia, y lamentablemente, la emergencia ha llegado.
Las dos presas, cuya construcción fue supervisada durante el mandato del exalcalde y actual diputado federal Armando Gómez, se han convertido en el único sustento de agua potable para la población de Ozuluama. La situación es crítica, y se estima que solo quedan unos pocos días antes de que el vital líquido escasee por completo en los hogares de la región.
«Es algo inusual y desafiante; originalmente, estas presas estaban destinadas a proporcionar apoyo a la comunidad durante aproximadamente un mes en caso de emergencia. Por lo tanto, estamos racionando el agua de manera estricta para intentar sobrevivir al menos otros 15 días, teniendo en cuenta la cantidad de agua que queda en estas reservas. Desafortunadamente, las lluvias no han llegado, y parece que dependemos de factores que están fuera de nuestro control», expresó el presidente municipal, Agustín Ramos Hernández.
En un esfuerzo por aliviar la situación, se han movilizado ocho pipas para distribuir agua entre la cabecera municipal y las comunidades cercanas. Sin embargo, la falta de agua potable está afectando de manera más severa a las comunidades más alejadas, lo que ha generado creciente malestar entre los residentes.
La población de Ozuluama enfrenta un reto sin precedentes, mientras que las autoridades locales hacen todo lo posible para administrar los recursos hídricos restantes y garantizar que la comunidad pueda sobrevivir a esta crisis. Se espera que las autoridades estatales y federales se involucren en la búsqueda de soluciones a largo plazo para esta situación crítica que afecta a la región.