EE.UU.-El influyente senador demócrata de ascendencia cubana, Robert Menéndez, se encuentra bajo escrutinio judicial después de que la fiscalía estadounidense lo imputara por soborno y extorsión en un caso que involucra a su esposa Nadine Menéndez y tres empresarios. El senador, quien ha sido una figura destacada en la política estadounidense durante más de tres décadas, rechazó las acusaciones y anunció su determinación de no dimitir.
«Creo firmemente que seré exonerado», afirmó el senador en una conferencia de prensa, donde también recordó su extensa carrera política y su compromiso con la justicia. Sin embargo, las alegaciones en su contra son serias y se centran en su presunta participación en una trama de sobornos y tráfico de influencias destinada a favorecer a empresarios y al gobierno de Egipto.
Según la fiscalía estadounidense, en el domicilio de Menéndez en Nueva Jersey se descubrieron 550,000 dólares en efectivo y lingotes de oro valorados en más de 150,000 dólares, junto con un lujoso automóvil donado por uno de los empresarios involucrados en el caso.
Menéndez defendió la acumulación de dinero en su hogar aludiendo a la historia de su familia, que fue víctima de la confiscación en Cuba, y afirmó que el dinero proviene de sus ahorros generados a lo largo de 30 años de trabajo.
Las acusaciones presentadas por la fiscalía del tribunal sur de Manhattan alegan que Menéndez compartió información sensible con Egipto para ayudar a un empresario egipcio-estadounidense, Wael Hana, a proteger su monopolio. También se alega que él y su esposa aceptaron sobornos a cambio de utilizar su influencia en beneficio de los empresarios y el gobierno egipcio.
Este no es el primer episodio de corrupción que involucra al senador Menéndez. En 2015, enfrentó acusaciones similares relacionadas con sobornos, vuelos en jets privados y donaciones ilegales de campaña. Sin embargo, los cargos fueron desestimados tres años más tarde debido a la falta de un veredicto unánime por parte del jurado y el retiro del caso por parte del Departamento de Justicia.
La nueva acusación de corrupción plantea interrogantes sobre el futuro político de Menéndez y, en última instancia, sobre la estrecha mayoría del Partido Demócrata en el Senado. A pesar de las acusaciones, el senador anunció su intención de buscar la reelección en las elecciones de 2024, en las cuales los demócratas se esfuerzan por mantener su actual mayoría de 51-49 escaños en el Senado.