En un hecho histórico, el presidente Bashar al-Assad huyó de Siria tras el colapso de su régimen, refugiándose en Moscú bajo la protección del gobierno ruso. La información fue confirmada por Sergei Ryabkov, viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, quien aseguró que Assad y su familia fueron trasladados de manera segura.
La caída del régimen se produjo tras una ofensiva liderada por grupos rebeldes islamistas que tomaron Damasco. Decenas de personas celebraron la salida de Al-Assad, quien gobernó Siria -con mano de hierro durante 24 años-, sucediendo a su padre en el año 2000.


El conflicto dejó al menos 910 muertos desde el inicio de la ofensiva y desplazó a 370 mil personas, según cifras de la ONU. Este nuevo capítulo abre un periodo de incertidumbre en Siria, que ha sido devastada por más de una década de guerra civil.
En tanto, la Embajada de México en Líbano emitió una alerta para los connacionales en Siria, instándolos a mantenerse en resguardo y ofreciendo asistencia a través de canales consulares.
