Como parte de las acciones del Operativo Frontera Segura, elementos de la Guardia Nacional (GN) aseguraron un cargamento de droga en la Aduana de Otay, donde interceptaron un tráiler que transportaba 537 kilogramos de metanfetamina y 60 kilos de cocaína ocultos en un doble fondo.
Este aseguramiento es resultado de los acuerdos de cooperación entre México y Estados Unidos para combatir el tráfico de drogas en la frontera, una de las prioridades del gobierno federal en materia de seguridad.
INSPECCIÓN Y DESCUBRIMIENTO
El aseguramiento ocurrió el viernes 7 de febrero alrededor de las 17:00 horas, cuando agentes de la GN realizaban inspecciones de rutina en la Aduana de Otay. Durante la revisión, notaron irregularidades en el piso de la caja del tráiler, lo que levantó sospechas sobre un posible compartimento oculto.
Tras una inspección más detallada, los agentes desmantelaron la parte inferior del tráiler, encontrando en su interior 205 paquetes envueltos en material amarillo que contenían metanfetamina, así como otros 50 paquetes negros con cocaína.
El cargamento ilícito viajaba oculto bajo una carga de kilos de tomates cuyo destino final era Estados Unidos. Ante esta situación, procedieron a la detención del conductor, quien fue trasladado a las instalaciones de la Fiscalía General de la República (FGR) para las investigaciones correspondientes.


OPERATIVO FRONTERA SEGURA Y REFUERZO DE SEGURIDAD
Este decomiso se enmarca dentro del despliegue de 10 mil elementos de la GN en los estados fronterizos, estrategia impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum para reforzar la seguridad en los cruces internacionales y evitar el tráfico de drogas, armas y personas.
En Baja California, se asignarán 3,100 efectivos adicionales de la Guardia Nacional, quienes se distribuirán en las garitas de Tijuana, Tecate y Mexicali. Su presencia buscará fortalecer la vigilancia en los puntos de mayor riesgo y contribuir a la reducción de delitos transfronterizos.


COMBATE AL NARCOTRÁFICO Y COOPERACIÓN INTERNACIONAL
El tráfico de drogas en la frontera entre México y Estados Unidos representa un desafío constante para las autoridades de ambos países. En este contexto, operativos como Frontera Segura buscan frenar el flujo de sustancias ilícitas, que generan violencia y financian a grupos criminales.
Este aseguramiento en la Aduana de Otay se suma a otros operativos recientes en los que se han detectado nuevas estrategias del crimen organizado para trasladar drogas en cargamentos comerciales. La vigilancia y la cooperación entre distintas instancias gubernamentales son clave para frenar estas actividades ilícitas y garantizar mayor seguridad en la región.



