En una ciudad fronteriza como Tijuana, donde la movilidad es esencial y las opciones de combustible abundan, elegir gasolina de calidad no solo protege tu vehículo, también optimiza tu inversión. A continuación, te presentamos una guía para reconocer combustibles que garantizan rendimiento y confianza.
UN VIAJE EN EL TIEMPO: LA EVOLUCIÓN DE LA GASOLINA EN MÉXICO
La historia de la gasolina en México comenzó con la llegada del primer automóvil al país en 1898. Sin embargo, fue después de la Expropiación Petrolera de 1938 cuando se consolidó la producción nacional de combustibles. En 1940, surgió la «Mexolina» con un octanaje de 70, seguida por la «Supermexolina» de 80 octanos en 1950 y la «Gasolmex» de 90 octanos en 1956. Estas mejoras respondieron a las necesidades de los vehículos de la época y marcaron el inicio de una industria en constante evolución.
REVISAR EL OCTANAJE: CLAVE PARA EL RENDIMIENTO DEL MOTOR
El octanaje indica la capacidad de la gasolina para resistir la detonación prematura en el motor. En México, las gasolinas más comunes son:
- Regular (verde): 87 octanos.
- Premium (roja): 91 octanos o más.
Utilizar el octanaje adecuado según las especificaciones de tu vehículo es esencial para evitar daños al motor y garantizar un rendimiento óptimo.
INVESTIGAR LA REPUTACIÓN DE LA ESTACIÓN: MÁS ALLÁ DEL PRECIO
No todas las gasolinas son iguales. Algunas estaciones destacan por su compromiso con la calidad y el medio ambiente. Investigar y elegir estaciones con buena reputación puede traducirse en beneficios a largo plazo para tu vehículo.
PRESTAR ATENCIÓN A LAS CERTIFICACIONES Y SELLOS DE CALIDAD
Las certificaciones son una garantía de que el combustible cumple con estándares específicos:
- NOM-016-CRE-2016: Establece las especificaciones de calidad para los petrolíferos en México.
- TOP TIER: Certificación internacional que indica altos niveles de detergencia en la gasolina, ayudando a mantener el motor limpio.
Verificar que la estación de servicio cuente con certificaciones puede darte tranquilidad sobre la calidad del combustible adquirido.
CONCLUSIÓN: INFORMACIÓN ES PODER
Elegir gasolina de calidad en Tijuana no es solo cuestión de precio, sino de conocimiento. Revisar el octanaje, investigar la reputación de la estación y prestar atención a las certificaciones son pasos fundamentales para asegurar el buen funcionamiento de tu vehículo y proteger tu inversión.
En un mercado con múltiples opciones, estar informado te permite tomar decisiones inteligentes y responsables.
