A casi un mes del fallecimiento de Brenda Leticia Cruz Cano, de 23 años, su madre, Brenda Elizabeth Cano, denunció públicamente el presunto entorpecimiento por parte de la Fiscalía General del Estado en la investigación sobre la explosión registrada el pasado 7 de abril en el complejo habitacional Océano 21, en Playas de Tijuana.
Durante una rueda de prensa realizada a las afueras de la Fiscalía de Contraloría y Visitaduría, la madre de la víctima lamentó que, pese al tiempo transcurrido, la carpeta de investigación permanece sin avances.
“Ya cumplió un mes de fallecida y el expediente sigue intacto, no se ha movido nada”, expresó visiblemente indignada.
La explosión ocurrió alrededor de las 17:00 horas en la calle Océano Pacífico y dejó tres personas heridas: Brenda Leticia, su hijo de cinco años y su pareja. Debido a la gravedad de las lesiones, fueron trasladados al Hospital General de Tijuana, donde Brenda luchó por su vida durante más de dos semanas.
La madre señaló que la joven no recibió atención médica especializada por la falta de infraestructura adecuada para tratar quemaduras de alta complejidad en Tijuana. De acuerdo con su testimonio, el hospital no contaba con equipo para realizar radiografías y no se aceleró el traslado a Mexicali, donde sí había capacidad para atenderla correctamente.
Por su parte, Cecilia Álvarez, asesora jurídica de la familia, informó que se presentó una queja formal ante el fiscal regional por la omisión de diligencias y la falta de integración de la carpeta. Además, responsabilizó a la empresa Baja Gas por no realizar las pruebas de seguridad necesarias antes de suministrar gas, como exige la ley.
“A un mes de la explosión, no hay una integración, no hay nada”, subrayó.
La familia solicitó que el caso sea reclasificado de homicidio culposo a homicidio doloso, y demandó una reparación del daño para la pareja e hijo de Brenda Leticia, quienes aún continúan en proceso de recuperación.
“Queremos justicia. Lo mínimo que pueden hacer es hacer su trabajo”, concluyó la madre de la víctima.




Fotografías: José Vargas