Redacción El Tijuanense
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, ha declarado la ley marcial en respuesta a lo que ha denominado «amenazas de fuerzas comunistas» que buscan desestabilizar el país. En un discurso televisado, Yoon afirmó que esta medida es necesaria para «reconstruir y proteger» a la nación de caer en la ruina nacional.
La ley marcial implica la suspensión de actividades parlamentarias y políticas, así como el control de los medios de comunicación por parte de las autoridades militares. Esta es la primera vez que se implementa una medida de este tipo en Corea del Sur desde 1980.
La decisión ha generado reacciones mixtas. El líder del Partido del Poder Popular, Han Dong-hoon, calificó la imposición de la ley marcial como «errónea» y prometió detenerla junto con el pueblo. Por su parte, el líder de la oposición, Lee Jae-myung, describió el anuncio como «ilegal e inconstitucional».
La comunidad internacional observa con atención el desarrollo de los acontecimientos en Corea del Sur, considerando las implicaciones que esta medida podría tener en la estabilidad regional y en las relaciones internacionales.