El Vaticano informó que el Papa Francisco mantiene una condición clínica estable sin cambios médicos relevantes. La oficina de prensa confirmó leves mejoras en su voz y movilidad. Aunque el pontífice aún enfrenta neumonía bilateral, la infección pulmonar reduce su intensidad paulatinamente.
Los análisis recientes no muestran indicaciones preocupantes en su salud. Francisco recibe oxígeno de alto flujo por las noches y en momentos del día mediante mascarilla especial. El resto del tiempo usa cánulas nasales.
El papa realiza ejercicios de fisioterapia motora y respiratoria diariamente. Aunque redujo su agenda pública, revisa documentos y mantiene encuentros clave, como con el cardenal Parolin. El pontífice celebra misa diaria y mantiene comunicación telefónica con la parroquia católica de Gaza.
Allí, más de 500 personas, incluidos musulmanes, buscan refugio. El Vaticano publicará el texto preparado para la Audiencia General este miércoles, pero el evento sigue cancelado desde febrero. No hay confirmación sobre su participación en Semana Santa.
La salud del papa influye en su modelo de gobierno y ajusta ceremonias vaticanas. Francisco reapareció sorpresivamente el domingo para saludar a fieles durante el Jubileo de los Enfermos. El líder católico permanece en su residencia tras 38 días hospitalizado.
Su equipo médico monitorea su evolución mientras continúa con tratamientos farmacológicos y terapéuticos.